1 feb 2011



¿Ves como se desploma un edificio?

Lavas los platos de la comida, y lo único que se escucha a la redonda es como se hizo añicos un tazón entre tus manos. Muy a lo lejos, casi como en un sueño, el silbato de los camotes.

Sales a la calle, y ni siquiera un zumbido de mosca, nadie diría que vives a tres cuadras del centro de la ciudad.

Lo ves. muy alto y muy mármol. Las puertas de cristal tan limpio que no deja pasar la luz. Tendrá diez años a lo mucho; no sale ni entra nadie, ni en estos quince minutos en los que lo observas, ni en los próximos tres días si tienes la paciencia de espiar. Imponente, pulcro, antihumano.

Sin embargo tú sabes que se desmorona, puedes escuchar como las hormigas taladran sus cimientos, la compañia de ratas royendo entre las paredes, la multitud de palomas cagando ácido en el techo. Es sólo cuestión de esperar con los ojos abiertos, con persistencia, con un encono de enamorado; un día caerá.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

ufff duro! soy tambien un castillo de naipes, cayendo vamos.

BEATRIZ dijo...

aayy susanita, imagino la angustia del arquitecto!!!

the lines on my face dijo...

cierto... todo se acaba... y pensar que fue la CASA de alguien, todavía más catastrófico... uff.