20 dic 2011

NO ME GUSTAN LOS TÍTULOS

Hay cosas que no caben en un título. El dolor de una realidad que se va metiendo en los huesos, lenta e insistentemente. La esperanza que te aprieta la garganta y duele más que la resignación. El miedo constante como la sangre, el amor más profundo que el alma.

No cabe en título el tamaño de los ojos de mi hija, ni su sonrisa sin dientes ni prejuicios. Su sueño más activo que su vida, sus manos más grandes que sus huesos.

No cabe si quiera en todas las palabras del mundo, esta pequeña soledad de suburbio, este silencio mordaz, estas caricias de ciego.

No me gusta etiquetar titulando, no me gusta vivir en catálogo, no me gusta nombrar lo que ya no sé como decir.

2 comentarios:

BEATRIZ dijo...

No pues esas son inmensidades para nosotros los mortales susanita, y eres afortunada de toparte con ellas...y yo contigo.

Así me he sentido tú sabes cuando, pero como tú, no se sabe cómo nombrar esos infinitos que nos tocan.

Me han encantado los ojos y la sonrisa de tu nena, siento que los he visto en tus palabras.

Te quiero mucho y quisiera abrazarte en la Navidad.

besitos,

muuuaaa!

Sybila dijo...

La mayoría de las cosas no merecen etiquetarse. Las experiencias con ellas van más allá de las palabras..¿qué son las palabras muchas veces sino un afán de aprehender lo que no se puede o no se merece aprehender?

No le enseñes a etiquetar a tu nena. Enséñale, más bien, a ver y a sentir el mundo.

Ella te lo agradecerá, aunque no encuentre las palabras exactas para decirlo.

Un abrazo, Deb